Siempre seré su fiel esclavo - Cap.2 (Final)

Claude, al ver a su adorado Sebastian, sonrie complacido y se acerca a el dándole una leve bofetada diciendole:
-Eres una pequeña zorra traviesa Sebastian-
Seguido, le lame y muerde su oreja y se aleja para ir a servirse una copa de vino.
Mientras Claude bebía vino observando a Sebastian,se acerca un joven que aparentaba la misma edad de Claude, se coloca a su lado igual observando a Sebastian.
-Que lindo juguetito que has traido- Le decía
al oido a lo que Claude respondió con una
pequeña risilla-¿Lo quieres?-
El joven al oir su repentina pregunta solo sonrío.
-¿Cuánto?- Pregunta el joven
Claude agitaba levemente la copa observandola con interés y hablando más para si mismo que al joven:
-Ummmm, ¿qué te parece si mejor te lo presto
cuando comenzemos?, hará todo lo que le
digas, te lo prometo-
Claude le ofrece unas llaves al joven que eran del candado de la correa, el joven las toma y se encamina con una pervertida sonrisa hacia nuestra pequeña victima hasta desatarle de la pared y llevarselo a su lugar mientras, Su Amo, le observaba divertido cómo se rehusaba.
El joven, cuyo nombre era Christian, jalaba a Sebastian y se formaron ambos en una fila donde habia amos con sus sumisos en el piso. Al principio de la fila donde todos esperaban y algunos solo veian, habia una pequeña, pero alta, mesita con un sumiso encima que estaba recostado boca arriba con sus manos atadas a sus pies, sus piernas obviamente abiertas, y una caja de madera con un candado que estaba puesta sobre su cabeza impidiendole ver mientras un amo ajeno a el le embestia violentamente mientras el sumiso gemia y gemia, gritando como loco, el amo, despues de un minuto, se separa de el y se retira para darle paso a su verdadero amo quien le desata y le quita la caja besandolo y felicitandolo y lo baja de la mesa llevandoselo. Seguido, Christian, jala a Sebastian acariciando su cabeza y hace que Sebastian suba a la mesa mientras Christian le ataba, igual que el anterior, con fuertes y resistentes nudos para despues besarle con pasion, se separa y finalmente le pone la caja cerrandola con candado para colocarse frente a el y desabrocharse la bragueta sacando su miembro ya erecto para de una solo estocada introducirse dentro de Sebastian y enseguida comenzar a penetrarle con fuerza arañando su palida piel dejandole leves marcas, al terminar, no sin antes correrse dentro de el, se aleja dandole paso a otro amo desconocido que habia salido de una fila distinta donde otros amos esperaban para penetrar al esclavo,el cual estaba desesperado por desatarse ya que senti una dolor horrible por los repentinos "cambios de tamaño", pasan un par de amos mas y se acerca Su Señor a observar la entrada de Sebastian de donde salía un liquido blanco a lo que Claude sonrie y sin avisar tomar fuertemente de las caderas a Sebastian acercandolo a su miembro y penetrarle con fuertes embestidas haciendolo gritar de mas dolor y Claude lleno de placer suspirando su nombre, con la mirada entrecerrada y aun embistiendole, acerca a su mano a la caja para ciegamente quitarsela y dejar ver el rostro de Sebastian lleno de lagrimas que salian de sus ojos los cuales miraban a Claude.
Claude termina corriendose en el interior de Sebastian, acumulando mas semen en su entrada, sale de el y le desata jalandole del cabello bajandolo de la mesa y poniendole en el suelo a la altura de su miembro para que Sebastian como acto seguido comenzara a lamer con lujuria los restos de sus fluidos metiendolo varias veces hasta al fondo casi tragandolo, despues Claude le empuja y el mismo se abrocha su pantalon, le pone nuevamente su correa y le jala llevandole a donde el se sentaba no sin antes agradecerle a Christian.
Claude llega a su mesa donde ya estaba servida su comida y se sienta colocando sus pies sobre Sebastian que le servia como mueble para descansarlos para comienzar a comer y en pocas ocasiones inclinarse a darle un pequeño bocado a su perrito.
-Sebastian, Sebastian...- Mencionaba Claude
mientras seguia comiendo -Haz sido una chica
muy buena, en la noche te daré tu premio pequeña
perra...-
A lo que Sebastian solo responde con un firme y respetuoso "Si, Señor" haciendo a Su Amo sonreir y que este quitara sus pies de encima, Su Amo se inclina a decirle un leve y dulce"Ven" mientras le colocoba una gabardina de piel negra sobre su espalda y le ofrece su mano la cula Sebastian toma temeroso y Claude le ayuda a levantarse sentandolo a su lado y ofreciendole su plato de comida con una amplia sonrisa indicandole que comiera y Sebastian obedece inmediatamente pues no habia comido desde la mañana. Claude recargaba su codo sobre la mesa y la cabeza sobre su mano observando a Sebastian mientras con su otra mano le acariciaba su negro y brilloso cabello.
-Eres tan bello Sebastian...-
Le quita el tenedor de la mano para tomarle de la nuca atrayendolo hacia el y besarle profundamente y Sebastian le correspondia diciendole cuanto le amaba.

FIN...

Siempre seré su fiel esclavo

Sebastian, con sus ojos vendados y sus manos y pies atados, solo esperaba, en el frio suelo, a Su Señor, Claude Faustus, quien le veia desde arriba con un latigo en sus manos y una sonrisa divertida dibujada en su rostro. Toma y mira curioso el mango del latigo y se inclina levemente hacia Sebastian haciendo que el mango tocara su rostro y este se alejara asustado, provocando una carcajada a Su Amo. Al terminar su risa se incorpora rapidamente comenzando a latigar a Sebastian, quien soltaba gritos desgarradores que aumentaban a cada golpe. Despues de unos minutos, Claude, se detiene, se vuelve a inclinar acomodando el cabello de Sebastian y le besa dulcemente el cuello y depsues la mejilla mientras acariciaba su pequeña entrada, despues se levanta saliendo de la habitacion dejando a Sebastian anonadado hasta que este de estremece por el repentino azote de la puerta provocado por Claude quien habia entrado nuevamente con una sonrisa sobria y en su mano portaba un consolador negro y en su otra mano una pequeña bolsita de tela. Al acercarse a Sebastian, abre la bolsita sacando de ella un par de pinzas metalicas, en cada una un par de bolas metalicas por igual, a cada extremo, Claude se acerca al pecho de Sebastian, acaricia, besa y muerde sus pezones para colocar cada una de las pinzas en cada uno de ellos y tomar violentamente a Sebastian de los cabellos levantandole haciendo que las bolas de las pinzas, atraidas por la fuerza de gravedad, jalaron hacia abajo los pezones de Sebastian haciendole gritar, Claude complacido por la reaccion de su amado, le besa con mucha pasion empujandolo hacia atrás para amarrar su cuerpo a la pared junto con sus piernas abiertas igualmente apegadas a la pared dejandolo inmovilizado, Claude lanza una mirada cinica al consolador y le susurra "ciertas cosas" a su oido mientras introducia el gran consolador en su entrada hasta llegar al fondo deleitandose con los horribles gritos de Sebastian que aun permanecia vendado de los ojos.
Sebastian, gritaba y gritaba sin que fuera escuchado y sus gritos se quedaran atrapados en aquella oscura habiacion haciendo que Claude se exitara cada vez mas susurrando el nombre de Sebastian ignorando su dolor.
Claude, desata a Sebastian aventandolo al piso, le coloca una corra y le ordena ponerse en cuatro, imitano a un cachorro, Sebastian obedece sin opcion alguna comenzando a caminar conforme Claude le jalaba de la correa sacandolo de la habitacion, y sin que Sebastian supiera, le lleva a otra habitacion donde se encontrabas varios Amos con "sus mascotas" que al igual que Sebastian carecian de sus ropas. Los demas Amos miraban a Claude que saludaba con gusto, mientras otros admiraban y alagaban la belleza del cuerpo de Sebastian. Al centro de la habitacion se coloca un señor de unos 30 años diciendo que no se impacientaran que pronto comenzarian, cada amo colocaba y amarraba de la correa a su respectivo sumiso poniendolos a todos muy juntos mientras les daban , a algunos, oredenes y estos sumisos comenzaban a besarse apenas lamiendo sus labios pues el amarre a la pared les impedia moverse con libertad. Sebastian estaba siendo tocado por un par de sumisos que estaban a cada de sus lados, uno le besaba y otro le masturbaba, los amos se separaban de ellos y algunos se sentaban a charlar, otros a comer y otros preferian disfrutar del espectaculo.

Mi señor no se encuentra, lo he estado extrañando mucho pero debo esperar hasta lo otra semana para que nuevamente el tome posesion de mi y me castigue por todas las cosas que he hecho en su ausencia estoy desesperado por sentir su cinturon sobre mi piel golpeada, que el me pise y me humille a mas no poder